Durante ocho días, la ciudad entera vuelve al pasado para recrear, de manera espectacular y brillante, una batalla ocurrida en 1538
Los Moros y Cristianos son las fiestas más importantes de Villajoyosa. Se celebran desde hace más de 250 años, en honor de Santa Marta, y conmemoran los hechos sucedidos en 1538, cuando los piratas berberiscos comandados por Zalé-Arraez intentaron atacar la ciudad.
Según cuenta la tradición, Santa Marta acudió en ayuda de los habitantes de la villa, provocando una riada que arrasó los barcos enemigos e impidió que los corsarios llegaran a la costa.
Como agradecimiento, el pueblo le nombró su patrona y a ella le dedican todos los años estos festejos, cuyo acto central es la representación del desembarco moro. Villajoyosa vibrará con su fiesta grande de Santa Marta del 24 al 31.
Las fiestas comienzan con los extraordinarios desfiles de los bandos moro y cristiano, que se producen los días 25 y 26 de julio: las distintas agrupaciones que forman cada una de las comitivas recorren las calles con aire majestuoso, siguiendo el son de la música.
Y llegada la madrugada del 28, se realiza el espectacular desembarco
Sobre las cinco de la mañana la gente empieza a acudir a la playa y, mientras los cristianos preparan la artillería de defensa en la orilla, más de 30 embarcaciones musulmanas se acercan a la costa.
Tras tomar tierra, ambos ejércitos luchan hasta llegar a los pies del castillo, que finalmente es ocupado por los moros. Por la tarde, las tropas cristianas vuelven para reconquistar la fortaleza: primero, intentan que los ocupantes se rindan, pero al no tener éxito las negociaciones, comienza una gran batalla que termina con la derrota de los moros, que son devueltos simbólicamente al mar.
Villajoyosa se llena de diversión y alegría con estas fiestas, y también le ofrece una gran variedad de actividades para disfrutar, como concursos gastronómicos, verbenas, castillos de fuegos artificiales o conciertos de música.
Fiesta de Interés Turístico Internacional en el año 2003
Los Moros y Cristianos se festejan en muchas localidades españolas, y en función de la historia propia del lugar, cada celebración posee unas características diferentes y originales. Lo que distingue a Villajoyosa y convierte sus fiestas en algo único es precisamente la celebración del desembarco.
Las fiestas de Moros y Cristianos de Villajoyosa, se celebran como cada año en honor a Santa Marta del 24 al 31 de julio, fueron declaradas de Interés Turístico Internacional en el año 2003.

Estas fiestas, que en Villajoyosa tienen una antigüedad de 250 años
Se rememoran un importante ataque realizado por los piratas berberiscos, supuestamente al mando de Zallé Arraez, en 1538 que fue repelido por los habitantes de la villa, y tienen la particularidad de presentar un combate naval y un Desembarco en la playa.
Lo que distingue a Villajoyosa es precisamente la celebración del Desembarco. Villajoyosa vibrará con su fiesta grande de Santa Marta del 24 al 31
La ofrenda floral en honor a las «Lágrimas de Santa Marta»
Los preparativos de la fiesta comienzan dos meses antes, en concreto el primer domingo de mayo, cuando tiene lugar la ofrenda floral en honor a las «Lágrimas de Santa Marta», a la que se le atribuye la victoria en 1538 sobre las naves de Zallé Arraez, aunque en realidad fue una riada lo que acabó con los navíos enemigos al encontrarse éstos anclados en la desembocadura del río.
Las fiestas comienzan con los desfiles de los bandos moro y cristiano, que se producen los días 25 y 26 de julio
Las distintas agrupaciones que forman cada una de las comitivas recorren las calles siguiendo el son de la música. Y llegada la madrugada del 28, se realiza el Desembarco.
Sobre las cinco de la mañana la gente empieza a acudir a la playa y, mientras los cristianos preparan la artillería de defensa en la orilla, más de 30 embarcaciones musulmanas se acercan a la costa.
Tras tomar tierra, ambos ejércitos luchan hasta llegar a los pies del castillo, que finalmente es ocupado por los moros. Por la tarde, las tropas cristianas vuelven para reconquistar la fortaleza: primero, intentan que los ocupantes se rindan, pero al no tener éxito las negociaciones, comienza una gran batalla que termina con la derrota de los moros, que son devueltos simbólicamente al mar.